TUITEA DESDE UN TREN QUEJÁNDOSE DE QUE NO HAY PAPEL HIGIÉNICO Y LA EMPRESA SE LO LLEVA
Hay pocas cosas más angustiosas que darse cuenta que no queda papel higiénico en el baño justo cuando más lo necesitas. Si estás en casa y guardas ese preciado bien en otra estancia, no queda otra que ir andando a por él o dar un grito a ver si algún familiar o compañero de piso nos puede echar una mano. ¿Pero y si estás en un tren, rodeado de desconocidos?
Adam Greenwood, un joven británico que se encontraba en un tren de la compañía Virgin viajando desde la estación de Euston (Londres) hasta Glasgow, descubrió con espanto que no quedaba papel en el cuarto de baño de su vagón. Y en vez de intentar hablar con uno de los trabajadores del convoy, Adam hizo lo que muchos millennials harían en su situación: contó lo que le estaba pasando a sus 16.000 seguidores de Twitter.
A ellos y a Virgin Trains, compañía a la que citó en un tuit en el que escribió “Acabo de hacer una razonable cantidad de caca y no hay papel higiénico en el tren de las 19:30 de Virgin que va de Euston a Glasgow. Por favor, enviad ayuda”.
Para sorpresa del joven, la operadora respondió a su tuit con este otro:
Hemos enviado ayuda y Adam se está recuperando, lo último que ha dicho es que “se encuentra bien”. El mensaje lo firma un trabajador cuyas siglas son AN que remata el mensje con una cara sonriente.
El episodio tuvo lugar el pasado dos de diciembre, y se ha hecho famoso ahora gracias al Daily Mail, que ha publicado la noticia y una entrevista con el protagonista de la escatológica anécdota. “Cuando vi que no había papel, pensé, ‘voy a tuitear sobre esto y a hacer reír a la gente’”. Después de hacerlo, el joven vio que “surgieron algunos chistes en Twitter, pero nada más. Entonces me di cuenta de mi problema: ‘en realidad no hay papel’. Además, nunca esperé ayuda. Si yo no hubiera tuiteado, no sé lo que hubiera pasado”.
Para que luego digan que quejarse en Twitter no sirve para nada…
Y es que no dejan el celular ni para ir al baño, cuando decimos que es como una extensión de su cuerpo no nos equivocamos
Adam Greenwood (Instagram)