COLLALTO EL ESTILO VENECIANO A TRAVES DE LOS SIGLOS
Estuvimos en días pasados invitados al After Office que ofreció La Cámara de Comercio Italiana que presentó la nueva línea de Prosecco Collalto Extra Dry y el prestigioso vino tinto Chianti Colli Fiorentini en el marco de su “Vino a taste of Italy”, para todos los socios de la Cámara italiana en el Perú.
Una degustación de vinos deliciosos que nos cautivaron a todos por su frescura, cuerpo y sabor único, como consecuencia de toda la tradición que envuelve la producción de estos vinos con más de más de mil años de historia y sus orígenes se remontan a las épocas del Sacro Imperio Romano Germánico, cuando su fundador Rambaldo I fue nombrado conde de Treviso.
Conversamos con Blanca Valdivia y nos contó naturalmente disfrutando una copa del delicioso Conegliano Valdobbiadene Proseco Superiore DOCG Spumante Extra Dry, que lo sentimos a gloria en estas tardes tan frías, y nos contó una historia fascinante de la familia que dio origen a estos vinos, que la comparto con Uds. mis queridos lectores.
La familia Collalto tiene más de mil años de historia y sus orígenes se remontan a las épocas del Sacro Imperio Romano Germánico, cuando su fundador Rambaldo I fue nombrado conde de Treviso. Y como debía ser en un buen cuento, aquí también hay príncipes y princesas, castillos e inmensas posesiones, leyendas y hasta un fantasma (el de la bella Bianca, enterrada viva en el castillo de Collalto por los celos de su patrona). Lo que no siempre hay en las películas de fantasía son los deliciosos vinos que la familia Collalto produce hasta el día de hoy, a partir de la uva cultivada en los viñedos de las colinas alrededor de sus castillos.
A la muerte del príncipe Manfredo di Collalto, en 2004, su extensa propiedad fue dividida entre sus hijas. La princesa Isabella Collalto de Croÿ, primogénita y madre del primer nieto varón, heredó el castillo de San Salvatore, la finca vitivinícola (250 hectáreas, con 150 hectáreas de viñedos) y la bodega histórica. A sus hermanas Ninni y Caterina les tocaron 1 200 hectáreas de pastos, bosques, ganadería, cultivos y viñedos también. Con noble elegancia, pragmática determinación y pasión sincera, las hermanas han perpetuado la tradición vitivinícola de la familia. La princesa Isabella se ha dedicado los últimos diez años a mejorar la calidad de los vinos y su Prosecco Cantine Collalto ha conquistado los mercados de todo el mundo. Las hermanas Ninni y Caterina están ganándose un lugar de honor en la denominación con los Prosecco Superiore Borgoluce.
Asimismo, la carismática Blanca nos contó , que el Escudo Real y Logotipo Collalto que aparece en cada una de las botellas lleva el Escudo de Armas de la familia,un Escudo acuartelado en blanco y negro que corona desde la antigüedad la puerta solemne de acceso al castillo de San Salvatore
Los viñedos de ambas propiedades se extienden por las hermosas colinas a los pies del impresionante castillo de San Salvatore. La vendimia, que aquí se realiza entre el 10 y el 20 de septiembre, es un momento mágico en el cual revive la historia milenaria de los Collalto. Hoy la uva ya no llega al castillo para el pisado con los pies, como lo hacía antiguamente. Sin embargo, desde el último piso del Palazzo Odoardo, construido en el siglo XVII entre las murallas del antiguo castillo, asomándose a las ventanas de la exclusiva y lujosa suite de tres recámaras, algunos afortunados huéspedes pueden asistir al alegre trabajo de la vendimia y al encanto de las vides cargadas de racimos maduros.
Mis queridos lectores realmente no les provoca tomarse un vinito heladito de esta fantástica colección, pues si le provoca, un mensajito y lo ponemos en su domicilio…
Elena Villar