TODO TIENE SU FINAL
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P. Elena Villar*
Nos parece que el título de nuestro artículo es parte de una canción tropical que escuchamos cuando éramos pequeños, y es verdad como una catedral todo tiene un inicio y un final, así es en todos los ámbitos de nuestra vida, y la gran verdad la única certeza es que tendremos un final antes o después eso tampoco depende de nosotros. Pensarán que le pasó a nuestra amiga, las fiestas navideñas y el cambio de año le imprimieron una tristeza no acostumbrada, puede que sí, puede que no, humanos somos…
No obstante estas reflexiones no las suscitan algo personal, pero si un emblemático hotel peruano parte de la historia de Lima, del Perú y los peruanos, donde se vivieron los acontecimiento más elegantes recordados de esa Lima que se fue, sobre todo de aquellos llamados “caballeros de fina estampa” frase de la autoría de nuestra querida Chabuca Granda y su tema «Fina Estampa», el cual compusiera dedicado a su padre don Eduardo Granda.
Se trata nada menos que del tradicional, señorial y lujosísimo en su época Hotel Bolívar que fue construido en el centro histórico de Lima, frente a la Plaza San Martín, y fue parte de un conjunto de obras que con motivo de la conmemoración del primer centenario de la batalla de Ayacucho en 1924, se construyeron para modernizar la Lima Virreinal, y para alojar a los importantes invitados a esa especial celebración, recordemos que fue el primer edificio hotelero moderno de gran envergadura que se construyó en la Lima de esa época.
La construcción fue iniciativa de los hermanos Agusto y Fernando Wiese, quienes encargaron la obra a la compañía norteamericana Fred T. Ley. El hotel se construyó sobre un terreno de 4.000 metros cuadrados de propiedad del Estado y su diseño se encomendó al arquitecto peruano Rafael Marquina y Bueno, siendo inaugurado el 6 de diciembre de 1924 por el Presidente de la República Augusto B. Leguía.
Respecto al nombre Bolívar se cuenta una anécdota que la escuchamos de don Ernesto Ascher F. acucioso investigador de la historia de Lima, resulta que el presidente Augusto B. Leguía, que se preparaba para esta gran celebración pregunto y cómo se llamará el Hotel todos pensaban que se debería llamar hotel Ayacucho… Sin embargo “Ayacucho” en quechua significa “Rincón de ánimas”, a lo que el presidente Leguía respondió «de ninguna manera, y ya que está frente a la plaza San Martín, frente a un San Martín sólo puede estar un Bolívar”…
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Plaza San Martín de Lima/ f: Audio Guías – Peru
Y por qué nuestro titular y toda la historia, pues que el glorioso hotel Bolívar podría ser rematado en subasta pública el 24 de enero de 2017 debido a una cuantiosa deuda que mantenían sus administradores. Según informo el SAT, la empresa Huron Equities, administradora del hotel, no ha logrado cancelar una deuda de S/500.000 en impuestos prediales, que arrastra desde el 2009.
Empero, no perdamos las esperanzas de seguir contando con nuestro emblemático hotel Bolívar, puesto que si los deudores pagan esta deuda y parece que si hay la intención, se salvará del remate… Sin embargo, todos los hoteles de cuatro y cinco estrellas han cambiado hacía distritos más al sur, salvo el Shereton Lima Hotel & Convention, que si es cierto que está en Lima, no está en el centro histórico. También es muy cierto que reconstruir el hotel Bolívar para obtener estándares internacionales teniendo en cuenta que se acerca a los 100 años, costaría mucho dinero…
¡Hotel Bolívar! Qué de historias de encuentros y desencuentros tus paredes habrán sido testigos… Si el Hotel Bolívar hablará…
Siempre es bueno recordar que el Hotel Bolívar fue declarado monumento nacional por Resolución Suprema 2900, del 28 de diciembre de 1972.
*Mg. En turismo y Hotelería
Investigadora y asesora en proyectos Turístico