EL RETROSPECTIVO ITINERARIO DE MI VIDA
Por: Hernán Villar*
Con lo enigmático que se vislumbran los raudos atardeceres a estas alturas e mi existir, no se me insinúa otra alternativa que especular con sabia filosofía, el recorrido que al devenir del tiempo, mis pasos encaminándose van, hacia la recta final.
Ante esa crucial perspectiva que me induce a suponer que el final el sendero está cercano, haciendo acopio e los últimos alientos que me quedan, me propongo firmemente continuar como diría el poeta “haciendo camino al andar”, hasta completar con la mayor dignidad el paradigmático ciclo de vida que aún tengo por delante.
Mas, valgan verdades, jamás imaginé ni reparé siquiera a lo largo del intenso trajinar por este tan controvertido universo de lágrimas y alegrías, arribar como lo estoy haciendo, sin cargar peso alguno a cuestas, a esta memorable de mí, si se quiere diáfana y a su vez inquieta existencia, que fijara su augurioso toque inicial, allá, en lontananza un 7 de abril de 1922, cabalístico día de la semana, en que el buen Dios haciendo gala de su proverbial generosidad y sabiduría daba luz verde para que pudiera dar el primer vistazo al mundo exterior que, por decir lo menos, me dejó desconcertado perplejo ante aquel tráfago de sentimientos encontrados, y hoy, 7 de abril del 2002, luego de tantísimas lunas y el inconmensurable discurrir del agua bajo los puentes, me encuentro muy orondo festejando mis primeros ochenta abriles, y no se vaya a pensar hecho un viejo cochocho, menos aún un anciano senil, no que va, estoy en posesión de la plenitud de mis facultades mentales, lúcido como en mis mejores tiempos, aunque como no, con una que otra ligera lagunilla, pero si reitero, como en mis mejores tiempos, tan es así de gratificante para este veterano escriba-locutor, el hecho de que el timbre de mi voz a despecho del tiempo mantiene su natural impostación, razón por la que sigo prodigándome frente al micrófono que es mi pasión, sin que mis asiduos oyentes malicien ni por asomo lo avanzado de mi edad.
Esa tesitura a dios gracias, permanece casi como cuando en los albores de los años cincuenta me iniciaba en esos etéreos ajetreos en las emisoras caraqueñas, prosiguiendo un par de años después, ya con más experiencia en Centro América integrando la famosa Cabalgata Deportiva Gillete. O como entrevistador en los programas producidos en Washintong por la Unión Panamericana, también como comentarista del Show Bussines de Hollywood en New York, México, y Europa. Más tare aquí en nuestra muy amada “Tres veces Coronada Villa” luego del dilatado peregrinar a lo largo y ancho de los cinco continentes, dirigir y conducir por espacio de 17 años el radio periódico “Noticias FM” e la emisora de lujo Stereolima Cien, así como también con el mismo cargo desempeñarme en el Noticiero radial el Acuerdo de Cartagena y vaya Ud. a saber en medio siglo cuantos, cuantísimos programas realicé aquí en Lima y en diversos países, varios de ellos galardonados con sendas preseas, tal el caso de “Festival Venezolano” que me hizo acreedor a la importantísima condecoración “Francisco de Miranda” en su primera clase, la más alta distinción que concede el gobierno e Venezuela por servicios distinguidos.
Más, como bien se dice para muestra basta un botón, sólo citaré a este programa que el próximo cinco de julio cumplirá 45 años de vigencia ininterrumpida en el cartel radiofónico del Perú, convirtiéndose por derecho propio en el decano entre los de su formato, trasmitiéndose actualmente a través de las ondas de “Filarmonía” la emisora cultural el Perú. Pero se me hace difícil dejar de mencionar otros dos programas más entre los muchos que me dieron grandes satisfacciones a “Los best Sellers de la Literatura Universal” y “Algo para Recordar” nostalgia musical a flor de piel.
Y con la pluma, mi trajinar fue y sigue siendo muy intenso, más de cincuenta años involucrado en cuerpo y alma a su fascinante accionar han hecho de mí el más conspicuo amante de ese cautivante mundillo de la comunicación que tuviera en mí, su toque inicial, el 18 de julio de 1950 con el reportaje “Lima Ciudad Jardín o Ciudad de los reyes” publicado a toda página en el tabloide caraqueño “Ultimas Noticias” por entonces el diario de mayor circulación en Venezuela, de allí en adelante sin descuidar del todo los estudios de derecho que cursaba en la Universidad Central de Venezuela, prácticamente me absorbió este oficio en que anteponiendo la ética a cualquier otra consideración no se detuvo ni se detendrá Dios mediante, hasta que mis facultades mentales así lo dispongan.
Cuantas, cuantísimas entrevistas y reportajes a eminentes personalidades de la política mundial, de la ciencia, la cultura, el espectáculo y los deportes tengo atesorados en el disco duro de mi memoria y tantas dramáticas como también hilarantes anécdotas y pasajes por la geografía de muchos países que pisaron mis inquietos pasos. Todo ese interesante bagaje de aventuras, venturas y desventuras están consignadas en las páginas de mi más reciente libro ya por aparecer que lleva por título “ Aventura, venturas y desventuras de un aventurero” por siaca eso de aventurero, claro en el mejor sentido de la palabra. Será éste mi quinto vástago, y como no hay quinto malo, espero que como los anteriores “Jaujali” “En Magdalena del Mar”, “En la Sultana del Avila” y “Tour en el Tiempo” sea bien recibido por quienes me honren con su lectura
No esta demás anotar que este quinto volumen basa su contenido en relatos testimoniales, nada en él es producto de la ficción, es decir, pues cada capítulo encierra verídicas vivencias.
Mención especial merece mi hija predilecta la revista ”TURISTA” que con gran alborozo para todo el equipo de redacción arriba con todos los honores a su vigésima octava edición, siempre manteniendo como en sus comienzos su fina calidad y profesionalismo periodístico. Empezó con 28 páginas y sólo en español, ahora cuenta con 80 páginas y su edición es bilingüe. Su permanencia ha tenido verdaderos ribetes de sacrificio, no obstante contra viento y marea sigue adelante y con mayores bríos, tanto así que gracias al denodado empeño que ponemos en su realización, el pasado año fue distinguida con el codiciado trofeo “Ciudad de Lima” en mérito a su calidad por la honorable Municipalidad de Lima Metropolitana, galardón que ha fortalecido aún más nuestro espíritu de lucha, producto del cual, no nos detendrá obstáculo alguno y “TURISTA” seguirá sin tregua cumpliendo al milímetro sus más caras metas que no son otras «que servir altruismo no servirse de él. (…)
*Fundador de la Revista Turista ene l Perú y el mundo
Nota de redacción: Artículo escrito en el 7 de abril 2002