EL PLACER DE LA BUENA MESA EN LA RUTA DEL DUERO
La Ribera del Duero está situada en el corazón de Castilla. Posee un paisaje espectacular en el que destacan sus bosques de ribera, sus viñedos y sus campos abiertos. Además, durante el recorrido podremos visitar varios castillos y, sobre todo, disfrutar de una cocina de sabrosas carnes y prestigiosos vinos.
Proponemos iniciar esta ruta (un fin de semana) en San Esteban de Gormaz. De su conjunto histórico-artístico medieval destacan los vestigios del castillo y recinto amurallado y las dos iglesias románicas (siglos XI-XII) de San Miguel y de la Virgen del Rivero.Tomamos la carretera N-122, que bordea el río Duero entre vegas, viñedos y suaves colinas. Poco más adelante un desvío de 9 kilómetros llega a Rejas de San Esteban, con su iglesia románica de San Martín (siglo XII). A continuación, llegaremos hasta Langa de Duero (16 kilómetros), con su interesante conjunto de antiguas bodegas y lagares subterráneos, una tradición que veremos en prácticamente todos los pueblos de la ruta.
De Langa sale un nuevo desvío (14 kilómetros) hasta Castillejo de Robledo. Su iglesia románica de la Asunción (siglo XII) posee notables pinturas murales del siglo XI. A 10 kilómetros se encuentra el monasterio de Santa María de la Vid, ya en la provincia de Burgos. Fundado en el siglo XII, su complejo arquitectónico combina el románico de su fundación con el gótico y el Renacimiento del siglo XVI.La siguiente visita es la villa de Peñaranda de Duero. Presidida por su castillo (siglo XV), son interesantes el Palacio de los Duques de Avellaneda y la iglesia colegial de Santa Ana (renacentistas, siglo XVI), la columna usada como picota, conocida como rollo jurisdiccional gótico y la Botica de los Ximeno, farmacia fundada a finales del siglo XVII.A pocos kilómetros está Baños de Valdearados, donde merece la pena visitar la Villa romana de Santa Cruz y sus espléndidos mosaicos (siglos IV-VI a.C.). Muy cerca también se encuentra Gumiel de Izán, con su iglesia de Santa María (siglo XIV).Aquí tomaremos la Autovía del Norte para recorrer los 12 kilómetros que nos separan de Aranda de Duero, la principal ciudad de la ruta.
Sus monumentos más destacados son las iglesias góticas de San Juan Bautista (siglo XIV) y Santa María la Real (siglo XV), el Palacio de los Berdugo (siglo XV) y el notable conjunto de bodegas subterráneas. No dejemos pasar la oportunidad de probar el famoso lechazo asado o las chuletillas a la parrilla en alguno de sus asadores.Seguimos de nuevo el curso del río Duero. A 21 kilómetros de Aranda está la villa de Roa, con su iglesia colegial de Santa María, gótico-renacentista (siglo XVI). Otros 24 kilómetros río Duero abajo, y ya en la provincia de Valladolid, nos encontraremos la villa medieval de Peñafiel. Su castillo medieval (siglo XI, reconstruido en los siglos XIV-XV) es uno de los más espléndidos ejemplos de arquitectura militar de España.El convento de San Pablo (siglos XIV-XVI; mezcla de gótico, mudéjar y plateresco) y el entorno de la Plaza del Coso constituyen un conjunto arquitectónico muy agradable de recorrer. También en Peñafiel se encuentra el Aula Arqueológica de Pintia, centro de interpretación de esa antigua ciudad celtíbera, situada en la pedanía de Padilla de Duero (a 3 kilómetros).Desde Peñafiel, 15 kilómetros nos separan del final de esta ruta. Tras atravesar el pueblo vinícola de Pesquera de Duero, llegamos a Valbuena de Duero, para visitar sus afamadas bodegas de Vega Sicilia y el monasterio cisterciense de Valbuena, (siglos XII-XIII) rodeado de los mismos viñedos que nos han acompañado a lo largo de la ruta.
Fuente/ Oficina de Turismo de España