NUESTRA VISITA AL PERÚ

Por. Josefina Haydée Argüello *
Quiero agradecer de sobremanera a Elenita Villar directora de la prestigiosa revista Turista Magazines Destinos por la cordial y maravillosa acogida que nos dio en nuestra visita al Perú. Ella supo ser nuestra guía por excelencia en la ciudad de Lima. Nos llevó por todas las áreas histórica donde no pudo faltar el recorrido por el centro de la ciudad, donde prevalecen sus adornados y populares balcones, la Plaza Mayor con El palacio de Gobierno, la Basílica Catedral, donde se encuentra la cripta de su fundador, Francisco Pizarro, el Palacio Arzobispal, usado como cabildo de Lima en los primeros años del Virreinato. Dentro del centro histórico visitamos la plaza San Martín, en homenaje al libertador don José de San Martin, gestor de la independencia del Perú y también el Museo y Catacumbas de San Francisco.
En Pueblo Libre, recorrimos el Museo Larco, con sus obras maestras del antiguo Perú y sus galerías, que muestran los 3,000 años de desarrollo de historia precolombina.
En el recorrido por el distrito de Rímac uno de los más tradicionales visitamos la Alameda de los Descalzos con su paseo construido en 1611 por el Virrey, Juan de Mendoza y Luna, Marqués de Montesclaros y que fueron mejorados por el Virrey Amat y Juniet entre 1770-76. Iniciando la construcción del Paseo de Aguas, donado a su bella amante Micaela Villegas “La Perricholi”, cantante y actriz peruana a quien el virrey en una noche de luna, le prometió poner “la luna a sus pies”. En 1856 el mariscal Ramón Castilla instaló las rejas de hierro forjado traídas de Inglaterra y estatuas griegas de mármol de Carrara de Italia, que representan los doce signos zodiacales. Lugar evocado por la compositora Chabuca Granda en su vals “La flor de la canela”.
No nos podía faltar la visita el santuario de Santa Rosa de Lima canonizada en 1671, y proclamada por el papa Clemente X, Principal Patrona del Nuevo Mundo. Al pie del pozo hicimos nuestras súplicas y desde allí pudimos apreciar la casa de San Martín de Porres.
En el distrito de Miraflores lugar donde nos hospedamos, visitamos sus playas con su delicioso clima de cielo azul y su dorado atardecer. Sus malecones con sus espectaculares puestas de sol, sus parques muy cuidados, con vista panorámica a la bahía de Chorrillos, junto a su emblemática cruz que descansa en el horizonte iluminando a los limeños. Sus rascacielos, el imponente hotel Marriot y las torres Parque Mar y en lo bajo al pie del océano el centro comercial Larcomar, y el Parque del Amor con la escultura, El Beso, en su centro.
Visitamos el parque Kennedy localizado en el corazón del mismo distrito donde degustamos unos deliciosos picarones acompañados de la típica chicha morada. Rodeados de pinturas y esculturas expuestas por artistas llegados de diferentes localidades y donde se encuentra la Iglesia de la Medalla Milagrosa.
En el distrito Barranco que antiguamente fue una quebrada natural donde los pescadores bajaban desde el Surco a las playas limeñas, se encuentra el monumento a María Isabel Granda Larco (Chabuca Granda) donde Elenita nos entonó “La Flor de la Canela” compuesto por Granda, vals inspirada en la afroperuana, Victoria Angulo. Luego hicimos un recorrido por la plaza de San Francisco.
En la plaza Barranco al frente de la biblioteca Municipal se encuentran en el medio de la fuente principal la figura de venus, Danaides, una de las 50 hijas de Dánao, rodeada de un jarrón etrusco llamado candelabro de Barbenini, y de pedestales con ángeles de mármoles de Carrara llamados Putti (niños desnudos con alas) o cupidos que hacen de este parque una verdadera atracción turística.
Visitamos el impresionante museo (Mali) Museo de Arte de Lima, donde se encuentra la pintura de Luis Montero “Los funerales de Atahualpa”. Dicha obra estuvo en la biblioteca Nacional cuando era su director el escritor y poeta tradicionalista Ricardo Palma. Tras la Guerra del Pacifico dicha obra había sido tomada por los chilenos y recuperada en 1885, gracias a sus gestiones. En un fotograbado escrito por Rubén Darío contenido dentro de Tradiciones Peruanas, aparece la visita que le hizo Darío a Palma en 1888. Mencionando la existencia además de la pintura del general Andrés Cáceres, montado en su “caballo guerrero de belfo espumoso y brava estampa” y la del indio legendario José Olaya, que siendo “correo de guerra, fue tomado por el enemigo y prefirió comerse las cartas que llevaba” antes que entregarlas”.
Se encuentra en el mismo museo también la obra: El rescate de Atahualpa, del pintor peruano Carlos Baca-Flor para completar estas series de pinturas referentes al último soberano inca.
No puedo dejar de mencionar la asistencia que hicimos a la cena Show de caballos Peruanos de Paso en la Hacienda D´depaso, con su arte culinario y bailarines campeones nacionales de danzas donde tampoco faltaron las tomas de fotos con los artistas y la presentación que nos hiciera Elenita al mismo dueño del local.
No podremos olvidar la visita a la asociación cultural de Brisas de Titicaca con sus danzas tradicionales del distrito de Puno y shows hasta la media noche por artista y bailarines nacionales adornados con sus vistosos vestidos y las mujeres con sus enaguas de colores al son de la famosa Marinera.
El 8 de marzo, Elenita junto a Ninoscka Ybazeta, Gerente de Relaciones Públicas del Crown Plaza en Miraflores, me invitaron a un almuerzo acompañada de destacadas periodistas de la ciudad, para celebrar el día Internacional de la Mujer. El ambiente de hermandad y camaradería entre ellas no faltó, haciéndome sentir en casa. Degustamos un exquisito manjar confeccionado a la perfección (una deliciosa entrada de ensalada de pulpo, seguido de la típica carne de lomitos salteados con ají, y el postre de queque de chocolate) ofrecido por el chef del Crown Plaza Jorge Chavarry. Se brindó al inicio con champagne y se tomaron fotografías haciendo de este evento un momento inolvidable.
Quiero agradecer a todas estas periodistas que me acompañaron y supieron brindarme amistad. Al personal del Crown Plaza, desde los Porteros hasta el Gerente General y a Ninoskca por la acogida que nos dieron haciendo de nuestra visita un placer y una experiencia que da deseos de repetir y la cual con mucho gusto recomendaremos a nuestros familiares y amigos.
Al arribo a muestra habitación nos estaba esperando una exquisita bandeja con variedades de quesos, una botella de vino, tarjeta de felicitaciones por nuestro 50 aniversario de boda “bodas de Oro” del Gerente General Emilio Pinasco Moscoso que junto al jacuzzi rodeado de pétalos de rosa creaban un ambiente exquisito e inolvidable.
Lima llamada “La Capital Gastronómica de Latinoamérica” es también la “Gracia de América” según dijera Darío, nombrando además a la mujer peruana: “la andaluza de América de breve pie y mano, boca roja que encendía y enloquecía”.
Agradezco una vez más a Elenita por ofrecernos, una copia de la edición publicada en 1995 del apreciado libro de su esposo (q.e.p.d.) Hernán Villar Zerpa, titulado: “En la Sultana del Ávila” y su poemario “Fragmentos”. Una autobiografía sobre su viaje a Caracas y que tanto como el Poemario, fueron narrados con una prosa exquisita.
¡Gracias Elenita: En nuestro viaje sí escuchamos la “sinfonía de grillos” mencionada por tu esposo, en señal de buena suerte!
Nuestro viaje permanecerá en nuestros recuerdos inolvidablemente. Agradezco a todos las finezas junto a las fotografías, champagne, galletas, tarjetas, tejido, el pizco que no podía faltar, tarjetas turísticas, libros de la ciudad, y la organización del resto del viaje, para continuar por El Cuzco, Valle Sagrado, el inolvidable Santuario Histórico del Macho Picchu una de las nuevas siete maravillas del mundo y a las Islas Ballestas, localizadas en la Costa de Paracas, en Ica donde apreciamos las aves guaneras como el guanay, piquero y el zarcillo, las colonias de pingüinos de Humboldt y los lobos marinos. Navegando hacia las islas se expone a la vista del viajero, el candelabro de Paracas, geoglifo de grandes dimensiones, que sirve de faro para los navegantes y cautiva al que pasa.
Metrópoli virreinal/ de mansiones principescas, / iglesias iglesias, / de Acho la fiesta brava, /de romances picarescos/ la Perricholi y Amat, / de galantes caballeros/ de tapadas rumorosas/ Lima, mi amada Lima/ remembranzas muy hermosas. (Hernán Villar Zerpa).
*Master en Literatura Españaola