BALCON DE VENEZUELA
“Ha sempre uma luz nova” (Hay siempre una nueva luz) Joscelino Kubitseek de Olivera, ex presidente de Brasil, creador de Brasilia.
VENEZUELA SIEMPRE (I)
UN PAIS CON RECURSOS TURÍSTICOS INACABABLES
Por Antonio-Pedro Tejera Reyes*
LOS HECHOS MARCAN LA PAUTA
Los momentos actuales que se viven en Venezuela, no son precisamente los mejores para escribir sobre sus posibilidades turísticas. La convulsión político-social y económica que vive el país, ha hecho que se conmocione hasta sus bases la estructura empresarial turística que laboraba en el desarrollo del país como un destino turístico apetecible como puerta de entrada para el turismo mundial a esa fabulosa América Hispana, donde tanto tiene que decir la ilusión y el trabajo de esos profesionales entregados de lleno a promocionar Venezuela en el exterior, en base a sus numerosos e incontables recursos como destino turístico emergente.
Fueron tiempos de gloria para el país, cuando bajo el manto de la Corporación Nacional de Turismo, se vivió, en 1971, la celebración del XIV Congreso de la Confederación de Organizaciones Turística de América Latina (COTAL) – organización cumpliendo hoy cincuenta y cinco años, a la cual pertenecemos desde ese inolvidable congreso, “ Claveles a Viena” incluido en esos inmortales recuerdos – en cuyo congreso resultara elegido presidente el venezolano Samuel Rojas, destacado personaje de la Asociación Venezolana de Agencias de Viajes (AVAVIT), quien viera culminada su célebre actuación con el impresionante congreso que se celebró el año siguiente en Panamá con la asistencia de más de sesenta países representados, y un mil quinientos delegados.
Héctor Jorge Testoni, director ejecutivo de la COTAL en aquel entonces, fue un brillante pilar en el cual se sustentó todo este desarrollo de la institución que marcó una época maravillosa para el turismo de América y del mundo, en un escenario donde no existía la asistencia de la red de comunicaciones que hoy tenemos, y donde, año tras año, los promotores del turismo privados y políticos, tenían forzosamente que desplegar todos sus recursos para dar a conocer sus ofertas, dentro de un panorama en el cual el contacto personal era uno de los factores más importes.
VENEZUELA MARCABA EL PASO
Los congresos de la COTAL fueron puntos estratégicos para dar a conocer todo un entramado de condiciones de excelencia que Venezuela ofrecía en aquellos años, al turismo internacional.
Épocas doradas, en las cuales no era raro encontrar en las más prestigiosas publicaciones internacionales reportajes escritos por auténticos profesionales, ilustrados con fotografías de los mil y un recurso que Venezuela posee dentro del campo de la naturaleza y la historia socio-económica de América.
Unos avances que dieron lugar a la modernización de aeropuertos, carreteras y obras públicas, unidas a un desarrollo del tejido empresarial que colocó al país como una referencia la hora de programar los viajes turísticos las gentes del norte.
El Panteón Nacional, Casa Natal del Libertador, la Cuadra de Bolívar y hasta las míticas leyendas como el caso de María Lionza, son atractivos turísticos que se combinaban con el “sol y playa” en lo cual Venezuela ofrece todo un inmenso panorama de recursos que llegan hasta la isla Margarita, sin olvidar la importante presencia de Los Andes venezolanos y sus míticos pueblos típicos agricultores y artesanos, donde se puede llegar hasta el teleférico más alto del mundo en el Pico Bolívar, uno de los primeros atractivos del Estado Mérida, cuya capital luce una arquitectura colonial de especial consideración dentro de este conglomerado de la América Hispana.
La vida de Caracas – esa de los techos rojos que cantaba Billo Frómeta – era toda una singular aventura que usted podía comenzarla disfrutando su especial gastronomía, como la tradicional del país, con su “Pabellón Criollo”, en El Portón, o en La Atarraya, en la Plaza El Venezolano, lugar este último, donde le acompañaba todo un espléndido repertorio de música ancestral venezolana, con un grupo que cantaba en vivo que era una delicia escucharlo. De ahí, a la zona de La Candelaria donde españoles y portugueses ofrecían los mejores elaborados platos de sus cocinas típicas… pasando por toda una alta representación de la cocina internacional en el centro de la ciudad, que llegó a tomar fama de ser donde mejor se comía de todas las grandes ciudades de Suramérica.
VENEZUELA EXPECTANTE
Como decía Joscelino, “siempre hay una nueva luz”, esa es la esperanza que todos tenemos y la fe en que pronto veamos resurgir esos valores turísticos que el país conserva permanentemente y que sin duda le coloca como una de las referencias más señaladas del desarrollo de una ruta turística hispano americana, tal como se hace en el norte, recorriendo varios países en ella.
Venezuela tiene que no ser olvidada. Es una obligación para los que queremos expandir los propósitos de la Organización Mundial del Turismo: perseverar en la aseveración de que el turismo es riqueza – social-cultural y económica – para la persona, la familia, la comunidad, y para el mundo entero. (OMT. Enero 2003).
Cosas y casos que no deberíamos de olvidar. Venezuela siempre.
*Del grupo de Asesores del OMT