EL GOFIO CANARIO: SUPER ALIMENTO

El gran alimento de los guanches que triunfa en el deporte de Canarias
Amasado con aceite de oliva, por las temperaturas que soportan, es ideal para apneístas, buceadores, pescadores, corredores de grandes distancias en montaña o en surfistas
Por. Gervasio Marrero
LAS PALMAS G.C.
Hasta hace poco, como no era protagonistas de selfis porque ahí arrasaba el muesli, se creía que el gofio de las islas Canarias era algo de entorno rural; pero poco a poco ya está plenamente metido en centros de deportes y gimnasios en formatos lógicos para su transporte y similares a bolsitas de gel. Quien hizo oficial el uso para resistir no fueron los isleños sino Cristóbal Colón en 1492, que tiró de esta harina insular para evitar desfallecer en su llegada al Nuevo Mundo. Si no llega a ser por el gofio, Colón habría pasado mucho más estrés calórico del que esperaba.
Poco a poco molinos de gofio como el de la gomera Cristina María Mendoza, Rayco Herrera, Eduardo Afonso, Sánchez Bruno y Moisés Goya se están convirtiendo en aliados en la práctica deportiva con este superalimento. Las marcas artesanales, porque las industrias del grano ya han detectado el negocio, están elaborando formatos útiles o más llevaderos. En definitiva: que no sea un producto incómodo o desagradable.
En las islas antes de la pandemia del Covid19 la producción anual alcanzaba los tres millones de kilos al año y se exporta a Japón, Estados Unidos, Alemania y países vecinos. El presidente de la Asociación de Productores de Gofio de Canarias, Vicente Díaz, afirma que «el desafío de los productores es no solamente vender gofio como se hacía hace cincuenta años si no también ir incorporando este producto como ingrediente en elaboraciones más complejas y valorizadas, en la alta cocina, en productos deportivos y en otros orientados hacia una alimentación saludable».
El farmacéutico Helidoro Méndez, de la asociación Sofía, para el fomento de la alimentación saludable, destaca que para un deportista el gofio es un compañero de viaje «con un alto valor nutritivo y una gran riqueza en nutrientes esenciales» y que «en el plan nutricional de base de cualquier deportista debe estar el gofio como alimento que aporta hidratos de carbono de asimilación media y lenta, fibra soluble y no soluble, vitaminas del complejo B, vitamina A y D, minerales importantes como el calcio, magnesio, potasio, sodio, fósforo, hierro, zinc…entre otros, ácidos grasos omega 6 poli insaturados, aminoácidos varios que en la mezcla de cereales y algunas legumbres alcanzan la mezcla ideal en el aporte de aminoácidos esenciales».
Destaca que «al ser el gofio un producto integral, el aporte de fibra dietética es importante, regula el tránsito y mantiene la salud intestinal , además retrasa la absorción de los hidratos de carbono simples y por ello modula los niveles de glucosa en sangre después de la ingesta de los mismos» y que «amasado en aceite de oliva es ideal en caso de deportistas que estén sometidos a bajas temperaturas como es el caso de apneístas, buceadores, pescadores, corredores de ultra distancias en montaña, esquiadores, surfistas, donde aparte del esfuerzo físico realizado con el consiguiente gasto calórico se les une el efecto termorregulador que también gasta calorías que deben ser repuestas».
Méndez apostilla que «en realidad el gofio nos permite elaborarlo de tantas maneras como nuestra imaginación e inteligencia práctica nos permita, siendo muy personalizada su elaboración y consumo» y que «este producto tradicional es un excelente complemento dietético» para deportes que requieren alta resistencia.