EL CAÑON DE LOS PERDIDOS: LOS REGALOS DE LA NATURALEZA A PERÚ
Estampas gráficas que impresionan, en este Cañón de los Perdidos, sumergido entre las arenas del Desierto de Ocucaje, un valor turístico incalculable que parece esperar su aprovechamiento como atractivo turístico de excepcional valor para Perú.
Los países no son ricos por lo que tienen, son ricos por lo que sus habitantes hacen con lo que tienen
Tratar de los recursos naturales y su valoración como atractivo turístico con relación a Perú, más que un ingente extraordinario trabajo, podíamos calificarlo como un recorrido espectacular que sería algo así como el colirio para los ojos, siguiendo un afortunado comentario de nuestro particular amigo gran rotario de Cusco, Gustavo Palomino Arce.
Desde El Bosque de Piedra, en Huallay, en la región de Pasco, hasta el Bosque de Pomac, en Lambayeque, el recorrido en este gran país admirando sus recursos turísticos naturales, puede ofrecernos distintas admirables paradas para disfrutar de la visión del Alpomayo, o “la montaña de los siete colores”, apartándonos de todo un extraordinario panorama que nos ofrecen sus recursos históricos de la cultura inca con su principal joya, Machu Picchu, en Cusco, y hasta una especie de avance de la misma historia, muy cerca de Lima, Rupac, conocido como “el Machu Picchu limeño”.
Todo un imponente escenario de recursos que hay que gestionar con conocimiento y experiencia, para que sirva a los peruanos para disfrutar de uno de los mejores niveles de vida del mundo, sumidos en el bienestar social que estos imponentes recursos les deben proporcionar. Una aseveración producida por un cuidado y serio análisis recogido y experimentado “in situ”, con largos viajes en su extenso territorio, y amplios contactos con relevantes personalidades del país, y humildes trabajadores de sus más amplios sectores políticos, empresariales y sociales.
UNA DIMENSION EXTRAORDINARIA
La caja de sorpresas que son los recursos para su desarrollo de la gran nación americana, nos dejan más que sorprendidos con los aportes sensacionales de la naturaleza, que no deja de aparecer por todos lados, como es el caso de El Cañón de los Perdidos, en el Desierto de Ocucaje, una nueva incorporación a los atractivos turísticos de Perú, situado a unos noventa kilómetros de la ciudad de Ica, es una formación natural producida por la erosión de las aguas del Rio Seco, hace más de 20.000 años. Alberga una gran cantidad de fósiles marinos con muchos miles de años de antigüedad, con una diversidad de cerros con diferentes capas de colores con una enorme grieta que fue formada por el cauce del río con formas caprichosa que le han dado la erosión del viento.
“El Cañón de los Perdidos, una maravilla escondida en Perú. Los cañones, con sus particulares formas moldeadas por la naturaleza, tienen algo especial y El Cañón de los Perdidos no podía ser menos. Este cañón que se encuentra en Perú, concretamente al sudoeste del distrito de Santiago, en Ica, es todo un tesoro que no había sido descubierto hasta hace poco, cuando se decidió explorar el lugar y uno de los coches encargados se perdió por el desierto; de ahí su nombre de origen El Cañón de los Perdidos.”